jueves, 20 de octubre de 2011

La privatización de la sanidad

No son buenos tiempos para los servicios públicos. Lo público se encuentra cuestionado bajo el paraguas de la necesidad de reducción del déficit y de la intención de descapitalizar el estado para que sea relevado por la iniciativa privada porque "no existe otra alternativa", según el pensamiento extendido en un amplio espectro de tendencias políticas y difundido por los medios de comunicación.

En nuestra Comunidad, este hecho es es particularmente visible con la creación de los nuevos hospitales de gestión privada (Alzira, Manises, Denia, etc).

¿Qué opinas, como profesional de la sanidad, de esta tendencia?. Esperamos tus comentarios.



8 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gustaría saber ¿qué se entiende por privatización y qué calado tiene?.
Me explico: si por privatización se entiende aplicar la "ley del embudo" y los entes privados se quedan con la parte que les es rentable y la que no lo es la derivan a los públicos, pues entonces la ruina pública está servida y aquellos enriquecidos a costa de todos.
Llama la atención que cuando van a privatizar no avisan y durante mucho tiempo lo niegan, peo luego resulta que sí. El que algo oculta...
Habrá que estar atento a las negaciones (como S. Pedro), que luego siempre canta el gallo y alguien sale crucificado (o desplumado)

trosok dijo...

Hola, Anónimo.
Tal y como ya está ocurriendo en Cataluña, primero se reduce la jornada ( y el salario) en los hospitales públicos. Ahora, ya se habla de que entrará a saco la empresa privada en la sanidad pública. Lo peor, lo injustificble, es que eso no estaba en el programa electoral del PP catalán ( perdón, CIU). Al menos, haberlo dicho, que fueran coherentes con su crudez. Pero ni eso

Arce Negro dijo...

Está claro que la sanidad puede ser un negocio para las aseguradoras y que para obtener beneficios y que estos aumenten exponencialmente de forma anual deberán reducir las prestaciones a sus "asegurados",y reducir la cualificación, el número , las condiciones laborales y las retribuciones de sus trabajadores. Ese es el futuro al que nos pretenden llevar cunado insisten en frases como la del conseller Luis Rosado en un encuentro de consejeros de sanidad: " Criterios de eficiencia en lugar de garantistas en las fórmulas de contratación ya que el modelo organizativo de la Administración es lento, multiplicado y garantista"

Gurov dijo...

¿Cuál es la justificación de la privatización?
Rentabilidad: NO, aunque sí para el empresario.
Mejor servicio:NO, menor personal y no demostrado que su organización sea mejor.
Mejor asistencia: NO, riesgo de limitaciones en el diagnóstico y en el tratamiento.
Mejor hostelería: quizá, hasta que se produce la saturación y los números no cuadran.

Entonces ¿Cuál es la excusa?
Hacer negocio. Es un campo magnífico que no estaba cubierto en un sistema económico con cada vez menos interés por la producción de bienes y más en la inversión en Servicios (sanidad, que ya recibe su porción de pastel con los planes de "choque" eternos, educación, que ya recibe su parte con la concertación y pronto vendrán servicios sociales, cárceles, seguridad etc).

Pero hay que pensar que otro mundo es posible y huir del pensamiento predominante en los medios

Ribereta dijo...

Pues yo creo que la entrada de lo privado en la sanidad pública se traduce en nepotismo y enchufismo a la hora de acceso al empleo, o eres de los suyos o no entras y si entras y te detectan vas a la calle (despido libre), además de lo que llaman flexibilidad en el personal que significa pura y llanamente carta blanca para hacer lo que la patronal quiera con el trabajador.
Se deduce que tras años de pelea para conseguir unas dignas condiciones de trabajo, oposiciones, traslados, etc.....el desembarco de las privadas en la sanidad pública valenciana borra de un plumazo todos los logros conseguidos. Quieren esclavos que no rechisten ni reivindiquen derechos para así obtener beneficios directos o indirectos.
Modelo Alzira igual a sobrecarga laboral de sus profesionales con plantillas infradimensionadas que trabajan más horas y cobran menos. Si rechistas no das el perfil y a la calle. Revolución YA.

trosok dijo...

Revolución ya. Esa es una frase buena, lógica, justa. ¿Cómo?, ¿manifestaciones?, Huelgas?, cómo?.
La gente normal estamos acostumbrados a pensar que nada puede cambiar. Uno de los más eficaces logros del sistema neoliberal esque ha fomentado el individualismo y el conformismo con lo que hay. Agachar la cabeza por una mecla de desconfianza, fatalismo y no sé qué mas. Con eso cuentan.
Haría falta un 15 M de los servicios públicos, de todos, en todo el país, pero con unas propuestas definidas, unas ideas claras, y no simplemente quejarse de todos y de todo, pidiendo la cabeza de todos.

Anónimo dijo...

Una de las medidas que propone SIMAP para defender los servicios publicos sanitarios es la concienciación pública de su utilidad. Perfecto, así ha de ser, pero es una labor larga. Tanto como concienciar a la población de que el partico actual desprecia lo público y prefiere lo privado. Lo tenemos ante nuestros hijos desde hace años y la concienciación no cambia.
Hemos de ser prácticos y eficientes. Mantener este objetivo, pero no quedarse ahí. Sabemos que las huelgas tienen muy poco impacto en los servicios públicos en el siglo XXI. Ya no estamos en la misma situación que el siglo previo. Veamos el impacto que las huelgas mantenidas han tenido en educación, por ejemplo, en Madrid: no han obtenido cambios, si perdidas de sueldo y mala imágen ante la sociedad.
No nos hagamos daño. Actualmente una huelga o varias huelgas no van a conseguir que se retire el decreto, si nos van a vaciar más los bolsillos, se los van a llenar un poquito a la Administración, probablemente va a tener poca participación, y no va a ser exitosa entre la población.
Hay que inventar medidas nuevas de presión,no seguir transitando por los mismos caminos cuando no conducen al éxito.
Medidas que dañen a la Asdministración, no a los pacientes, no a los profesionales. ¿medidas informáticas, bloqueos de correos,mensajería sumamente voluminosa para ocasionar bloqueo de correos electronicos, etc. Interferir en su trabajo no en el nuestro.
Seguro que teneis en la mente muchas más medidas.....

Anónimo dijo...

Primero. Al igual que con la educación, el acceso universal a la sanidad es indiscutible desde el punto de vista de la dignidad humana. Segundo. A partir de ahí, la administración pública, como garante de los derechos de los ciudadanos, debe hacerse responsable de proporcionar ese servicio. Tercero. Implicar a la empresa privada en las decisiones importantes de gestión supone arriesgarse a que el afán lucro personal, inherente a la actividad privada, impida proporcionar los servicios necesarios y con calidad. Por eso, la actividad privada en la sanidad se debe limitar a la colaboración en áreas no relacionadas con toma de decisiones, por ejemplo, limpieza, mantenimiento, cocina, transporte sanitario, apoyo informático,... y puntual y transitoriamente con clínicas privadas hasta conseguir la cobertura pública de prestaciones pendientes.